El uso de la Inteligencia Artificial (IA) es otra innovación que contribuye a la digitalización del sector dental. Su uso está cada vez más expandido gracias a las ventajas que supone para la práctica, ya que permite ofrecer diagnósticos, tratamientos y seguimientos más eficientes y precisos, reduciendo los tiempos e incrementando la precisión respecto a los métodos tradicionales.
La IA tiene muchas aplicaciones en el sector dental y, a medida que se desarrolle la tecnología, irán surgiendo más que seguirán digitalizando la práctica dental.
Algunas de las aplicaciones más comunes en la actualidad son:
- Asistentes virtuales entrenados para satisfacer las necesidades de los dentistas, lo que permite a los profesionales agilizar el flujo de trabajo.
- Recuperar y analizar historiales de pacientes mediante algoritmos que detectan patrones para identificar lesiones o infecciones en los pacientes de manera precisa.
- Cepillos dentales inteligentes para recopilar información de los pacientes y proveer a los profesionales con datos sobre los hábitos de cepillado de los pacientes.
- Análisis de rayos X intraorales y extraorales, lo que puede llegar a reducir hasta un 70% del tiempo y esfuerzo que dedican los profesionales a la creación de gráficos dentales, tal y como concluye un estudio de la FDA.